The fruitman's chronicle to the Second Self-Bombastic Congress
El sábado 13 de Octubre, a las once cincuenta y cinco de la noche, pulsé el botón del interfono. Ya no había marcha atrás, en apenas unos minutos entraría en al ático parnásico de la calle Casanova, sede del Segundo Congreso Internacional de Autobombo.
"Es normal que estés nervioso", me dije. En efecto, mi estado no era el más adecuado. No me había afeitado, lucía una pija chaqueta deportiva de algodón, y no había preparado ponencia o "acto" alguno. Además, mi compañero de piso me había acojonado con su relato apocalíptico del Primer Congreso. Mis únicas armas eran dos porros preparados con mucho amor, y seis latas de cerveza. ¿Sería suficiente? ...
leer toda la Chronicle...
11 comentarios:
Como no podía ser de otro modo, el salido de Fruitman se ha salido de nuevo. De no ser porque su figura es tan inmensa que crece día a día, podríamos decir que "ha entrado por la puerta grande". Sin embargo, incluso la grande se le ha quedado pequeña y lo hemos tenido que meter por la azotea. Un aterrizaje triunfal sin duda!!! Gracias, Fruitman, tu autobombismo congénito nos hace aún más grandes a todos!!!
P.S.: Debo negar, no obstante, las acusaciones de frutofilia que sobre mi persona se vierten en el párrafo 11 de esta magnífica crónica (imagino que se trata simplemente de una licencia poética...)
Yo también me autobombeo (quitándome las Ray Ban y lanzándolas al mar) ante esta bendita crónica. Propongo que este señor sea (al menos por un día) Doctor Horroris Causa de nuestro preciado colectivo.
P.D. Polbín, no niegues tu polbifilia que yo también fui víctima (feliz) de tus magreos.
¡PERFECTO! Nuestro cronista vuelve a demostrar su dominio en la aprehensión de realidades complejas, y gracias a la celeridad y destreza verbal que lo caracteriza, nos saca por fin, a los que como yo no pudieron asistir al ya reputadísimo conciliábulo, en mi caso debido a mis ya conocidos autoasesinatos diarios y a la insalvable laguna de mi egregio egotísmo (también llamado mediterráneo) que nos separa, ilustres compañeros, nos saca, por fin lo digo, del abismo sobre el que me columpio desde que os imaginé en el Parnaso, dioses y diosas de la belleza y la justicia, con la cornucopia rebosante de sustancias prohibidas y vuestra ludofilia bañada en alcohol.
Bombeada mi curiosidad con esta inquietante crónica, espero otras versiones que desvelen hechos silenciados, o los tergiversen..., ¡¡CONTADLO TODO!! no temais, no se lo diremos a nadie...
ruborizado estoy ante vuestras gratas palabras (por otro lado, totalmente merecidas)
tan sólo deseo que sean muchas más las crónicas que pueda escribir en tiempos venideros.
un abrazo bombásticos, y os emplazo a mis actos en japón, en dos semanas :)
...pasmado, anonadado me he quedado ante el despliegue de sutileza y ritmo perpretado en la crónica de nuestro frutero. Voto a Dios que el autombombo está rayando altísimo! Ah, pinches cabrones, qué buena fiesta. Desde lejos les hago llegar mis admirados rebuznos de alegría y contento.
¿Se puede decir más? ¿Se puede decir mejor? No lo sabemos. POr eso mismo me uno a esa propuesta zarista y os conmino a todos a relatar vuestras aventuras personales en el congreso como yo haré ahora mismo (dios, q nervios ¿se puede decir más? ¿se puede decir mejor? sin duda no, pero por mi autobombismo que lo intentaré). Gracias, Fruitman, por librarnos de las desaliñadas y desabridas consabidas Actas del Congreso y endulzar con tu fruta fresca la algunas veces rancia despensa del bombín.
Fruitman, gracias, leo tus honestas reticencias primigenias (ya ves, landiman se excedió) y continuo leyendo -hipnotizado- tus postreras crónicas, las cuales me recuperan mil lagunas y emociones perdidas de soslayo.
-------
Camaradas, el agua de valencia sí que estuvo a la altura de las grandes pócimas lisérgicas!
Salut i Autobombisme!!
Y yo me pregunto polbinamente: ¿no nos estaremos propasando un poco con el peloterismo endoautobombástico? Vale que la crónica no está mal, incluso bien, pero... a mí me han metido mano mucho mejor! :-)
(Espero que en próximos congresos pongamos más atención en estos temas...)
no hay mano que por bien no venga, así que me ofrezco a meterte mano como te mereces, cosa que hago bastante mejor (y mucho más a gusto) que escribir crónicas.
el peloterismo endoautobombástico no sólo es siempre insuficiente y merecido sino que es nuestra razón de ser. No olvidemos que podríamos caer en el peor de los errores: la crítica analítica; la mires por donde la mires sólo es consecuencia de la envidia, una actividad castrante y paralizante que en na da induce a la creación. Como dice nuestro nuevo principio programático...
con los ojos siniestrados ya por el pantallito, ando a traviesa coleteando el cadàver por los autobombàticos fields, echando al zurròn echando al zurròn, para luego màs luego, com le he dit al Ogre, leerlos con los ojos remojados de nueve en sal.
Publicar un comentario